Empezaré mi relato por el domingo que aún no había contado...
Ese domingo de hace 7 días amaneció bastante soleado, todo lo contrario del tiempo que, ya por la tarde, hizo posteriormente.
Al llegar al final del paseo aún estaba solo y le pregunté al Sr. Caracol -¿o era Sra.?- si había visto a alguno de mis amiguitos, pero todo lo que hizo fue esconder sus antenas, claramente una señal de interrogación "gasterópoda", indicándome que no sabía nada de ninguno de ellos.
No tardó mucho tiempo en llegar Lila, recién llegada de los calores de Madrid para refrescarse un poquito en la húmeda Asturias. Estaba muy recuperada de sus heridas pero aún seguía oliendo el rastro de algún felino por lo que tuvimos que estar muy atentos para que no se escapase detrás de ninguno.
Por el camino encontramos unas vaquitas... si, esos animales que yo creía que eran caballos con cuernos. Estaba intentando socializar con ellas cuando se nos acercó un antiguo amigo, que esta vez si nos dijo el nombre... Se llama Pichuli y era amiguísimo de ese par de bóvidos domésticos.
Nos saludamos, le dimos las gracias por la información y continuamos nuestro paseo hasta el parque aprovechando el buen tiempo que hacía.
En el parque el buen Otto recibió una pequeña clase de "ordeno y mando"...
Otto quería una piedrecita y su bipe no. Al final ganó el más alto de los dos... Aunque he de deciros que, al mínimo descuido de su bipe, Otto volvía a las andadas, arf, arf, arf.
También estaban los Toys, pero no recuerdo muy bien que trastada hicieron para
que los castigaran a estar ataditos... A veces creo que tengo la memoria de Dory pero a mucho más corto plazo que ella, aunque papi dice que es peor tener a un Sr. alemán visitándote todo el día y y sin recordarte que has olvidado las cosas y no saber si son o no importantes.
Pero de lo que si me acuerdo es que Tommy apareció con una correa larguísima y su bipe llevaba una bolsa que le entregó a papi... Papi no quería pero al final aceptó el regalo. Abrió la bolsa, soltó una exclamación: ¡Carajitos!, y se relamió. Aunque después se enzarzó en una pequeña discusión conmigo sobre si eran solo para él o tenía que repartirlos con nosotros los canes... Lamento deciros que salimos perdiendo y no os puedo decir si están ricos, pero a juzgar por la cara que pone papi cuando se como uno -se los raciona para que le duren más- deben de estar muy buenos; ¡qué olor desprenden!.
Por la tarde salimos a pasear. Papi me dijo que me sentara entre las flores, que era una foto muy primaveral y así podría encontrar novia pronto... Yo no me lo creí, pero si él es feliz así no le voy a hacer enfadar. Menos mal que solo fue un momentito, si Pepa me llega a ver seguro que se burlaría de mí...
Al llegar al parque el día se estropeó. Bajamos solo unos pocos colegas e hicimos lo que pudimos para pasarlo bien
, pero no nos ocurrió ninguna aventura extraordinaria que contaros. Quizá fue el mal tiempo que nos quitó las ideas caninas y eso que yo las busqué, sobre mis dos patitas y con la ayuda de Tommy, por todo el parque para que nos ayudaran a pasar
la tarde. Únicamente Luna trajo algo de emoción a tan aciaga tarde pero ella también acabó cayendo en una profunda desidia perruna que la hizo tumbarse para recibir rascaditas de los bipes, ¡Increible!
En fin, ese domingo no dio mas de si así que aquí debajo os dejo el enlace a las fotos...
Sol y Lluvia
Por otro lado ayer sábado fue un día extraño. Orbayaba un
poquitín, pero ni a Otto ni a mi nos importaba demasiado. Estuvimos explorando un enorme montón de arena pero sin ensuciarnos demasiado.
Cuando nos aburrimos continuamos nuestro paseo hacia el parque de abajo... Y entonces apareció el protagonista del día, mi amigo Golfo.
Realmente este labrador es buen perrito y, aunque yo no estaba por la labor, al final me convenció para que le diera unas pocas clases de Kung-Fu perruno. Realmente tengo que agradecerle su interés porque me divertí muchísimo
enseñándole mis técnicas de lucha y de esquive... Y aunque al principio parecía que me iba a ganar, yo soy un auténtico atleta y, recurriendo a toda mi energía, logré dominar a este grandullón y someterle. Ahora solo os dejo un par de fotos,
pero podéis ver las que faltan en la presentación que hay mas abajo, e incluso hay un pequeño vídeo donde veréis mi rapidez con mucha mayor claridad. Espero que os gusten.
En cuanto al resto de la jornada fue especial.
Tommy me regaló unos huevos de casa -debe de ser por los "carajitos"- y yo le dije a papi que debería hacerle un bizcochito de los suyos... , se lo hizo y creo que le gustó mucho y es que el bizcochito de papi está Mmmmmmm.
Por la tarde nuestros
amigos no se hicieron esperar y fueron apareciendo uno tras otro por el parque. Rufo se trajo una pelotita roja que sirvió de diversión a muchos de los colegas.
Alana se acercó a saludarnos -hacía mucho tiempo que no venía- y el bueno de
Golfo se prendó de ella... Fue un amor al primer olfato, pero no le dijimos nada pues todos sabemos que Alana bebe los vientos por Otto... Aunque éste se hace el duro con ella y se lo hace pasar bastante mal, pero seguro que la insistencia femenina al final dará sus
frutos...
Yo, por mi parte estuve con Duna que me parece una chica formal y muy guapa, pero no me hizo caso, supongo que querría un poco de intimidad para esto del amor y, claro está, delante de todos los bipes no quiso darme ni un solo lametón... es un poquito vergonzosa ella.
Del resto del día no os cuento más, os dejo las fotos...
Con Golfo
Y un pequeño vídeo...
Jugando con Golfo
Lo de ayer domingo intentaré hacerlo esta semana...
Patitas y Rascaditas
Yogui